Entre las teorías más influyentes que intentan explicar el origen de la delincuencia juvenil está la teoría de las subculturas criminales, desarrollada por Albert K. Cohen en su obra «Delinquent Boys: The Culture of the Gang» (1955). Esta teoría ofrece una perspectiva sociológica del crimen, especialmente en contextos urbanos y desfavorecidos, revelando cómo las desigualdades sociales generan culturas alternativas donde el delito se convierte en símbolo de estatus.
La delincuencia juvenil es un fenómeno complejo que ha intrigado a sociólogos y criminólogos durante décadas.
¿Quién fue Albert Cohen?
Albert K. Cohen fue un sociólogo estadounidense y profesor en la Universidad de Yale, influenciado por la Escuela de Chicago y por teóricos funcionalistas como Émile Durkheim y Robert K. Merton. Su enfoque se centra en cómo los valores culturales y la estructura social moldean el comportamiento delictivo colectivo, particularmente entre adolescentes de clase baja urbana.
Fundamentos de la Teoría de las Subculturas Criminales
1. Frustración de estatus (status frustration)
Cohen parte de la idea de que los jóvenes de clase baja enfrentan un sistema educativo y social que valora normas de clase media: logro individual, disciplina, éxito académico. Al no poder competir en igualdad de condiciones, estos jóvenes experimentan una frustración de estatus. No pueden alcanzar reconocimiento por medios convencionales, y eso genera una respuesta colectiva.
2. Formación de una subcultura alternativa
En respuesta a esa frustración, los jóvenes forman subculturas con valores invertidos. Por ejemplo:
| Valores dominantes | Valores subculturales |
|---|---|
| Éxito académico | Rechazo al estudio |
| Obediencia a la ley | Desafío a la autoridad |
| Individualismo | Lealtad al grupo |
Aquí, la conducta delictiva se convierte en medio de obtener estatus, respeto y pertenencia. El vandalismo, el robo, las peleas o el consumo de drogas no son actos aleatorios, sino formas simbólicas de resistencia.
3. La delincuencia como fenómeno grupal
Una de las grandes aportaciones de Cohen fue enfatizar que la delincuencia juvenil no es solo individual, sino colectiva. Las pandillas o bandas juveniles funcionan como comunidades con reglas propias, jerarquías internas y mecanismos de aceptación.
Diferencias con otras teorías
| Teoría | Autor | Diferencias clave |
|---|---|---|
| Anomia | Robert Merton | Cohen se enfoca en la juventud y lo colectivo, Merton en la adaptación individual |
| Teoría del control social | Hirschi | Hirschi cree que los jóvenes delinquen por falta de vínculos sociales; Cohen dice que crean sus propios vínculos |
| Asociación diferencial | Sutherland | Cohen añade la frustración de estatus y el papel de las instituciones escolares |
Ejemplos y aplicaciones actuales
Aunque la teoría fue formulada en los años 50, sigue siendo relevante para entender fenómenos contemporáneos:
- Pandillas juveniles urbanas: Como los Latin Kings o Mara Salvatrucha, donde el respeto se gana mediante actos delictivos o violentos.
- Subculturas escolares: Grupos de jóvenes que rechazan el sistema educativo, lo desafían y crean sus propios códigos de éxito.
- Barrio y marginalidad: En zonas con exclusión estructural, las bandas ofrecen estructura, identidad y sentido de pertenencia.
Críticas a la teoría de las subculturas criminales de Cohen
Aunque innovadora, la teoría ha sido cuestionada:
- Falta de enfoque interseccional: No considera suficientemente el rol del género, la raza o la etnicidad.
- Generalización excesiva: No todos los jóvenes marginados forman subculturas delictivas.
- Cambio en las estructuras sociales: Hoy el acceso a internet, la globalización y nuevas formas de socialización desafían las formas tradicionales de subcultura.
La teoría de las subculturas criminales, clave para comprender la marginación social
La teoría de las subculturas criminales de Albert Cohen es clave para comprender cómo la marginación social puede generar culturas alternativas donde la delincuencia funciona como símbolo de estatus y resistencia. Aunque el contexto ha cambiado desde los años 50, las ideas de Cohen siguen teniendo eco en los estudios sobre pandillas juveniles, exclusión social y cultura del crimen.
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